Importante es quién eres, pero tan importante o más, es a quienes dejas entrar en tu vida. ¿Qué les permites, qué les apruebas, qué les aguantas, cómo te hacen sentir?. Lo que toleras de las personas que te rodean, también dice mucho sobre ti.
Elige bien con quién te relacionas porque no todo el mundo suma. Algunos, solo saben a restar...
Deberíamos ser más conscientes de nuestras capacidades, tener más confianza en nosotros mismos e intentar superarnos día a día. De vez en cuando, tendríamos que sacar la patita un poco más allá de la línea que pone límite a nuestras acciones. Hasta que no sales de ahí, no te das cuenta de lo que puedes llegar hacer.
Somos mucho más listos de lo que nos pensamos. Démonos la oportunidad de demostrárnoslo.
Eso que tú llamas defecto, puede ser lo que te da personalidad.
Nos hacemos "bullying" a nosotros mismos cada vez que despreciamos nuestro cuerpo, criticamos nuestro físico y desvalorizamos nuestra persona.
Deberíamos ser un poco más solidarios y tolerantes con nosotros mismos e intentar caernos cada día un poquito mejor.
"No te hagas a ti, lo que no le harías a los demás"
Mira, haz lo que te venga en gana, di lo que te salga del corazón le pese a quien le pese, no pierdas un minuto por nadie que no lo merezca y no dejes que cualquier mindungui te amargue el día.
Como se suele decir: Tú, a la tuya, porque nunca llueve a gusto de todos.Para ser feliz, tienes que rodearte de personas que te quieran, personas que te ayuden en determinados momentos, personas que te roben una sonrisa y que limpien esa lágrima que se puede escapar en algún momento, personas que pierdan su tiempo por ti y te defiendan a capa y espada. O sea.., personas que valgan la pena de verdad.
Todo lo demás son gente, y con la gente nunca podrás contar.
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